El estudiante de gastronomía de 20 años Luis Fernando Távara Lazo y su papá, el analista de crédito de 58 años, Raúl Távara Requena son los creadores y dueños de TALA, el emprendimiento que se enfoca en confeccionar mochilas térmicas para poder transportar fácilmente y con seguridad alimentos y/o otros productos.
Como cuentan, la idea nació en los meses que se inició la pandemia, ya que en la provincia no se tenía afluencia del servicio delivery y tampoco se conocía un lugar dentro del departamento que ofreciera este producto para las tan demandadas empresas de delivery. Por eso, en abril de 2020 nació oficialmente TALA.
El emprendimiento se enfoca en confeccionar mochilas térmicas para poder transportar fácilmente y con seguridad alimentos y/o otros productos.
Lo inicios, según recuerdan, estuvieron llenos de mucha incertidumbre. “No sabíamos si los modelos iban a gustar, pero gracias a Dios, tuvimos una gran acogida y poco a poco TALA se fue haciendo conocido”, explican.
En esta línea de incertidumbre los emprendedores también cuentan que se les complicaba confiar, tener la certeza de que los pedidos solicitados sí eran reales.
Además, que, emprendiendo en medio de una pandemia escoger los materiales y vacilar entre los precios altos no fueron tareas sencillas.
La adecuación del producto a sus necesidades es algo que realmente destaca y valoran los usuarios de TALA.
No obstante, cuando los clientes comenzaron a llegar fue tanto el gusto que sintieron que, gracias a ellos, se fueron sumando más conforme crecía el emprendimiento.
La adecuación del producto a las necesidades que los usuarios pedían era algo que realmente destaca y valoran los usuarios de TALA.
“Brindamos modelos según la necesidad y requerimiento del cliente. Y a eso se añade que hay una diversidad de colores con materiales que son 100% calidad, con servicio responsable y seguridad en la entrega”, aseveran los dueños de TALA.
Es así como el negocio familiar, que echa a andar de la mano de 5 personas: los padres y los tres hijos, quienes ayudan en publicidad, logró su mayor afluencia entre agosto de 2020 y abril de 2021.
Ofrecen modelos según la necesidad y requerimiento del cliente. Y a eso se añade que hay una diversidad de colores con materiales que son 100% calidad, con servicio responsable y seguridad en la entrega.
Pero este no ha sido su único logro, sino que, de pasar de 3 clientes semanales, hoy ya son entre 7 y 8 por semana.
En cuanto a sus planes a futuro, esperan seguir creciendo en el negocio, se ven comprando más máquinas y centrarse no solo en la confección, sino también en ropa.
A otros emprendedores, recomiendan que “si tienen algo en mente ponerlo en acción. No tener el temor a iniciar y recordar que somos los únicos que podemos el límite”.
