El licenciado en psicología de 27 años, Julius Krüger es el dueño de Krüger Naturals. Como menciono, aunque muchas veces el nombre del negocio es de los factores sobre el que más se da vueltas para que quede perfecto, este no fue el caso de Krüger Naturals.
Como cuenta el emprendedor, fue su amiga Kiara Wiese, quien le ayudó con el diseño y logo para la marca, y no solo ello, sino que fue ella misma quien dio la opción del nombre. “La verdad que yo tampoco sabía otras opciones así que con ese nombre quedó, y hasta el momento siento que le queda bien”, confirma.
Por el momento, en Krüger Naturals únicamente se enfocan en la producción y venta del polvo de hojas del árbol Moringa Oleifera. “Planto los arboles de moringa junto a mi papá, lo cosechamos, le damos su debida limpieza y filtrado para posteriormente envasarlo en bolsas de papel estilo Kraft y publicitarlo. Yo mismo hago el delivery”, asegura Krüger.
Por el momento, en Krüger Naturals únicamente se enfocan en la producción y venta del polvo de hojas del árbol Moringa Oleifera.
Él realiza el delivery en bicicleta dentro de Piura; y dado que el emprendimiento se enfoca en un producto que ayuda a mejorar la salud física, es una filosofía que funciona tanto para el cliente como para Krüger, es decir, los clientes reciben un suplemento alimenticio y el emprendedor se ejercita entregándolo.
Como cuenta el licenciado en psicología, sus padres manejan una ONG llamada Plan Verde e.V. la cual se dedica a la reforestación y plantación de árboles en áreas áridas. Ellos aportaron en gran escala a la expansión del árbol Neem en la región de Piura, Cajamarca, Tumbes y Lambayeque.
“Planto los arboles de moringa junto a mi papá, lo cosechamos, le damos su debida limpieza y filtrado para posteriormente envasarlo en bolsas de papel estilo Kraft y publicitarlo. Yo mismo hago el delivery”, asegura Krüger.
Siendo así, Krüger siempre ha estado cerca de la naturaleza, plantas y árboles. También plantaron árboles de Moringa Oleifera por la simple curiosidad de ver cómo crecen, y, tal y como lo observó el emprendedor: “crecen como hierba mala, pero necesitan técnicas de podar especiales para obtener la producción abundante de hojas, de las cuales está hecho el polvo”.
Entonces, como tuvieron los mencionados árboles por varios años, en vez de cortarle las ramas cada 2 meses, el emprendedor decidió convertirlas en el producto.
Aunque, no fue hasta mayo del 2021 cuando comenzó oficialmente con este proyecto. Si bien es cierto, en pandemia nacieron muchísimos negocios, la gente no podía trabajar porque las restricciones no lo permitían, entonces hacían algo propio, y allí fue cuando nació la inspiración de iniciar Krüger Naturals, utilizando el tiempo libre que forzosamente dio la pandemia.
Pero como los mejores caminos se forzan los retos, Krüger Naturals no fue la excepción. La producción y el packaging fueron sus dos más grandes dificultades por superar.
En un inicio, el emprendedor obsequiaba los productos a algunos amigos para que los prueben y luego sus familiares y conocidos empezaron a hacerle pedidos. Así, estas amistades más la publicidad en Instagram hicieron que poco a poco el emprendimiento fuera despegando.
Incluso, recuerda que su primer pedido fue del tío de su novia, quien le dijo que sentía interés en el producto. “Fue satisfactorio porque iba a ser mi primera venta. Y desde allí llegaron, por recomendaciones de aquel familiar, llegaron muchos más”.
Pero como los mejores caminos se forzan los retos, Krüger Naturals no fue la excepción. La producción y el packaging fueron sus dos más grandes dificultades por superar. En cuanto al packging, el emprendedor admite que le fue arduo encontrar las bolsas de kraft que hoy maneja y que le mejoraron por mucho la presentación del producto.
Julius Krüger es el dueño de Krüger Naturals. Como menciono, aunque muchas veces el nombre del negocio es de los factores sobre el que más se da vueltas para que quede perfecto, este no fue el caso de Krüger Naturals.
Y, sobre la producción, desde un inicio solo han sido su padre y él sembrando unos cuantos árboles por lo que era limitada. Aunque, al día de hoy ya están listos para cosechar y dar el siguiente paso.
Con el tiempo y gracias al esfuerzo del emprendedor comenzaron a llegar mensajes a través de WhatsApp, de amigos, familiares y recomendados. Siempre con el apoyo de su papá lograba empacar los pedidos a tiempo.
Entonces, de solo vender a familiares de amigos, ahora definitivamente se ha expandido y venda a personas que lo ubican por Facebook o Instagram.
Con el tiempo y gracias al esfuerzo del emprendedor comenzaron a llegar mensajes a través de WhatsApp, de amigos, familiares y recomendados.
Aunque por el momento no está pensando en planes de expansión, no descarta desaprovechar la oportunidad si se le apareciera.
“Yo me centro en el polvo de Moringa, el cual está hecho de las hojas (se lavan, se secan, se muelen), pero también se podría hacer té de las flores, aceite de las semillas. Es un árbol que ofrece diversas formas de consumirlo y así gozar de los beneficios de salud que brinda”, concluye.
