Khiabett Peña Reyes es una emprendedora innata que aprovechó sus habilidades manuales para expandir su cartera de productos, creando así “Khia Boutique y Accesorios”, un negocio online dedicado a la venta de accesorios como collares, pulseras, aretes y hasta diademas personalizadas hechas a mano.
Gracias a su gran éxito en el rubro de las joyas artesanales, ha logrado dictar diversos talleres de verano dirigidos a niñas desde los 8 años. Hoy en día, está próxima a lanzar su nueva colección con la técnica del alambrismo.
Gracias a su gran éxito en el rubro de las joyas artesanales, Khiabett ha logrado dictar diversos talleres de verano dirigidos a niñas desde los 8 años.
Una oportunidad para expandir sus productos
En su búsqueda de ser independiente económicamente, Khia, como la llaman sus amigos, decidió empezar esta aventura llamada emprendimiento vendiendo ropa, calzado y accesorios a pedido.
Sin embargo, no fue hasta diciembre del 2019, cuando llevó un curso para la elaboración de accesorios hechos a mano, que vio un futuro prometedor.
Lo que diferencia al negocio de Khiabett es el amor, la dedicación y el entusiasmo que le pone a cada uno de sus trabajos.
“Me siento muy orgullosa de mi avance. Llevo 1 año como artesana y he aprendido a hacer diversos productos 100% artesanales, finos e innovadores”, comenta Khia.
La técnica que predomina en la mayoría de los accesorios que elabora es el “soutache”, palabra francesa que significa trenza.
Este método, utilizado desde mediados del siglo XVIII en Francia, consiste en coser con puntadas invisibles los cordones de rayón, sujetando diferentes joyas o aplicaciones en el proceso.
La técnica que predomina en la mayoría de los accesorios que elabora es el “soutache”, palabra francesa que significa trenza.
3 ingredientes importantes
Khiabett indica que aquello que diferencia su negocio de otros del mismo rubro es el amor, la dedicación y el entusiasmo que le pone a cada uno de sus trabajos.
“La unión de estos 3 ingredientes es lo que hace que mis clientas regresen, me recomienden y, sobre todo, se sientan orgullosas de llevar cada pieza de mi marca”.
La pandemia le afectó como a miles de emprendedores porque se cancelaron las celebraciones y los cumpleaños no se celebraron como antes, pero gracias a su talento y al apoyo de su familia pudo superarlo y ahora se encuentra preparando su siguiente colección con una nueva técnica.
Planes a largo plazo
Khia ha recorrido un largo trayecto con su marca pues empezó en la mesa de su hogar solo con algunos metros de cordón, una tijera de pedicura, un encendedor y una cinta métrica.
Actualmente, cuenta con material suficiente para elaborar varios modelos, está en proceso de formalizarse al 100% y sus trabajos ya han llegado a Trujillo, Lima y Cajamarca.
Su meta es tener presencia en todo el país, expandir y posicionar su marca y abrir su propio local.
Finalmente, a todos los emprendedores allá fuera, Khia los motiva a no rendirse fácilmente.
“El mundo de los negocios no es nada fácil, pero para eso está tu mente y las ganas de superarte; y si caes, puedes volver a levantarte. Estos tiempos nos han enseñado a valorar a la familia y el trabajo de uno”, sostiene.
