Kary Castillo: Conectar con personas a través del arte del maquillaje

Por Roxana Vasquez Palacios

La Administradora de Empresas de 33 años, Karina Paola Castillo Yamunaqué, es la dueña de kary Castillo, emprendimiento que lleva su nombre porque, como lo explica la fundadora, “siempre quise tener una marca personal y que lleve formalmente mi nombre, no como asociado a un término específico de mi rubro”.

Kary Castillo es un servicio de belleza, que se enfoca en hacer extreme makeover para fechas especiales, pero no solo eso, sino que, también, las clientas pueden tomar clases de automaquillaje bajo técnicas sencillas, paso a paso y completamente personalizado.

La idea de emprender se gestó hace más de tres años con una amiga de Karina, pensaban en importar maquillaje para trabajar juntas, pero nunca se llegó a concretar la idea y cada una tomó diferentes caminos. Aunque, la idea ya estaba sujeta a la hoy dueña de Kary Castillo.

“Yo diría que, incluso, desde muy pequeña ya sentía curiosidad o pasión hacia los colores, las texturas y esos radicales cambios que te llevan de un extremo a otro cuando empiezas a crear”, expresa la emprendedora.

Kary Castillo es un servicio de belleza, que se enfoca en hacer extreme makeover para fechas especiales, pero no solo eso, sino que, también, las clientas pueden tomar clases de automaquillaje bajo técnicas sencillas, paso a paso y completamente personalizado.

Fue exactamente un 10 de julio de 2020 cuando, en medio de una pandemia, inició oficialmente este proyecto. Un camino que la administradora, afirma, “no es fácil”.

“Aunque me considero una persona extrovertida, dinámica y con ímpetu nunca imaginé todos los temores que he sentido desde que inicié. El exponerte y hacerte amiga de la cámara no es nada sencillo”, aclara.

Empezó maquillando a sus amigas, vecinas, primas y, pese a que no recibía remuneración económica, Karina lo hacía porque lo disfrutaba y sentía que debía practicar en diferentes rostros. También, dando sus primeros pasos contaba con pocos cosméticos. Recién estaba iniciando clases y sus técnicas, considera ella, eran buenas pero básicas.

“No me atrevía al color, le tenía miedo.  Y a eso se suma mis trasmisiones en redes que estaban llenas de nerviosismo y temores. Las fotos que debía tomar no tenían buena iluminación e, incluso, no sabía nada de edición de fotografía beauty”.

Empezó maquillando a sus amigas, vecinas, primas y, pese a que no recibía remuneración económica, Karina lo hacía porque lo disfrutaba y sentía que debía practicar en diferentes rostros.

Por el lado de las clientas, la emprendedora recuerda Melissa, una de sus primeras clientas. Ella es Srta. Turismo Negritos 2020 vive muy cerca la casa de Karina con lo que se le hizo fácil visitarla para que sea, de forma oficial, su primera clienta.

Según cuenta, quedó encantada con el resultado del maquillaje, al igual que su familia. “Me hicieron sentir que estaba en el camino correcto”, recuerda Castillo.

Sobre las dificultades que se le presentaron a Karina, ella indica que “como todo emprendimiento fueron aquellos momentos donde sentía que daba todo de ella, pero que las personas no lo valoran y hablo del alcance en redes sociales que hoy por hoy se ha vuelto la mejor forma de vender tu producto”.

Hoy ha crecido y de atender a una clienta por mes ha pasado a tener de 2 a 4 a inicios del 2021. Un crecimiento rápido considerando que empezó a mitad del 2020.

Con el paso del trabajo, las clientas vieron en esta administradora alguien en quien pueden confiar, que más que brindar un servicio de belleza encuentran una amiga con la que conectan para contarle cómo les gustaría el look y, así, lograr el resultado final que las asombra.

“Eso me llena de satisfacción, me emociona a mil y me motiva a seguir trabajando en esta bella carrera”, continúa diciendo la emprendedora.

Hoy ha crecido y de atender a una clienta por mes ha pasado a tener de 2 a 4 a inicios del 2021. Un crecimiento rápido considerando que empezó a mitad del 2020.

¿Planes? Claro que sí, por el momento está trabajando en implementar un  Studio de Maquillaje salir de la ciudad para mostrar su arte y conectar con más mujeres.

 

 

Related Posts