La contadora Susana Mejía Ruiz y su hija, Alexandra Serrano Mejía, administradora de profesión son las dueñas y creadoras de Mantra Comida Saludable. Aquí, cada una cumple un rol muy importante para desde él poder aportar al crecimiento del emprendimiento. Susana se encarga de la cocina y Alexandra de la administración.
“El nombre de Mantra Comida Saludable nos tomó tiempo pues quería algo corto, pero con mucho significado”, manifiesta Serrano. Finalmente, fue Susana quien, como siempre había asociado su vida con su mente y relajación se decidió por Mantra.
Así, elaboraron el logo inspirado en un tatuaje que se hizo Susana hace poco (una flor de loto) y cuando juntaron el nombre y el tatuaje (logo) supieron, inmediatamente, que sería el ideal.
Desde aquel día se propusieron en hacer de Mantra Comida Saludable el lugar perfecto donde encontrar almuerzos y ensaladas saludables a domicilios, gimnasios, centros de labores o donde sea que se encuentre el cliente. “También ofrecemos planes semanales, mensuales y aceptamos pedidos diarios hasta una hora puntual de la mañana”, dice Serrano.
Comenzar con ese negocio, recuerdan que se trata de un viaje al 2018 cuando Alexandra estaba cursando el 4to ciclo de la universidad y Susana trabajaba como contadora independiente, además de en otras labores. “A mi mamá siempre le gustó cocinar y en la casa cada día preparaba un platillo saludable que a ambas nos encantaba”, recuerda la administradora.
Fue así como Alexandra le propuso a su madre intentarlo y un domingo fueron a Makro, compraron descartables, imprimieron el logo y lo pegaron en cada bolsa. El lunes siguiente Susana preparó 10 platos de Ají de Quinua con pollo, arroz integral y ensalada; los entregaron a conocidos, familiares, amigos, fueron a bancos, gimnasios etc.
Pero no solo ello, también improvisaron una cuenta en Facebook e Instagram y, así, lograron que las personas las etiqueten. Pasaron los días, crearon una carta, la publicaron en redes y poco a poco fueron llegando los clientes.
Ellos les escribían, llamaban, hacían sus pedidos y tan solo a pocas semanas lograron que las personas compren planes semanales y hasta mensuales. “Todo nos iba saliendo como queríamos”, segura Serrano.
Por parte de los clientes, reconocen que su primer contacto con Mantra Comida Saludable fue memorable por lo que escribían a las emprendedoras y les dejaban mensajes donde destacaban el rico sabor, excelente servicio, dejaban constancia que las recomendarían y todo ello sumó para motivar a madre e hija.
Aunque, para no dejar una idea errónea. Emprender es un reto y estas emprendedoras lo descubrieron al inicio, cuando llegaban buenos mensajes, pero también se encontraron con obstáculos que debieron derribar. “Aprendimos de los errores con todo lo que nos pasaba”, manifiesta la administradora de Mantra Comida Saludable.
Uno de estos tropiezos ocurrió en el delivery cuando entregaban las bebidas y estas se volcaban en el desplazamiento de la movilidad. “Las bolsas no eran las adecuadas y algunas personas se quejaron de que la comida les llegaba revuelta. Nos obligamos a mejorar en ese aspecto indagando, viendo páginas de Lima y así mandamos a hacer bolsas con nuestro logo para mejorar el servicio”, asegura Serrano.
No obstante, agrega que el reto más grande fue el trato con el cliente pues había de todo tipo desde los más amables hasta los más difíciles de satisfacer. “Aprendí mucho a sobrellevar mis emociones, reacciones, actitudes, es decir, aprendí a la fuerza sobre atención al cliente”, exclama convencida Serrano Mejía.
Por su parte los clientes que las acompañan desde hasta más de 4 años consideran que Mantra Comida Saludable tiene una excelente atención al cliente pues se adaptan a los cambios en los pedidos, están atentas a las dudas, a los cambios de dirección, horarios de delivery y son flexibles ante lo que se pueda presentar.
Así, diariamente crecían con más fuera y fue exactamente luego de 6 meses de haber comenzado cuando notaron los cambios, “yo manejaba las redes sociales, sin experiencia profesional. Hacía post, fotos, me esforzaba mucho y eso dio frutos”, aunque, la emprendedora hija también destaca que la publicidad boca a boca les ayudó mucho a hacerse más conocidas.
Con todo ello pasaron de vender de 8, 12, 15, 20, 50, 60 platos en un inicio a, hoy en día, vender 100 platos diarios con 2 opciones de almuerzo diarias y más de 10 tipos de ensaladas, también, todos los días.
“Aunque no estamos ni en la mitad de lo que nos gustaría. Estamos orgullosas de lo que vamos logrando, queremos cada vez ser más conocidas por nuestra sazón, servicio y calidad para llegar a tener ventas de hasta 500 platos diarios”, asegura Serrano.
Y, de ser solo madre e hija con una idea y manos muy trabajadoras, actualmente ya son todo un equipo de 6 personas donde los deliverys salen a las distintas rutas, incluyendo 26 de Octubre, Piura y Castilla.
Aunque aún no tienen planes a futuro, se mantienen firmes en seguir posicionándose en Piura para de estar bien pasar a estar super excelentes. A otras emprendedoras que se inspiren en su historia ellas les recomiendan que empiecen sin miedo, pues nada se pierde intentando, sobre todo cuando se hace con dedicación y esfuerzo.
“Nosotras creíamos que ese lunes iba a ser nuestro único día de entregas, luego de 4 años se nos llena el corazón de alegría de lo que hemos podido lograr en todo este tiempo”, concluyen.