El año 2025 se perfila como un periodo de transformación en la manera en que los consumidores interactúan con el mercado. La personalización y la experiencia de compra se han convertido en ejes fundamentales para el éxito de cualquier emprendimiento. Entender quién es el cliente y cómo se comporta es, hoy más que nunca, la clave para adaptarse a un entorno competitivo, especialmente en países como Perú, donde muchos negocios cierran en su primer año de vida.
Emprendedor: Cinco tipos de consumidores que debes conocer este 2025
Uno de los perfiles más interesantes es el consumidor híbrido. Este tipo de cliente alterna entre compras en línea y presenciales según su conveniencia. Utiliza el comercio electrónico para comparar precios y encontrar ofertas, pero prefiere acudir a una tienda física cuando necesita evaluar de cerca ciertos productos.
Su versatilidad y capacidad para adaptarse a diferentes canales lo convierten en un consumidor muy exigente, que espera una experiencia de compra integrada y de calidad en cada punto de contacto.
Por otro lado, encontramos al comprador impulsivo digital. Este consumidor se deja llevar por la inmediatez y la exclusividad de las ofertas que se difunden a través de redes sociales, live shopping y recomendaciones de influencers.
Su decisión de compra suele ser rápida, impulsada por la emoción y la urgencia de aprovechar una oportunidad que, en ocasiones, es limitada en el tiempo. Los negocios que sepan crear estrategias atractivas y generar un ambiente de urgencia podrán capturar la atención de este perfil.
El consumidor consciente representa una tendencia en crecimiento. Este cliente valora y busca marcas comprometidas con la sostenibilidad, el comercio justo y la responsabilidad social. Está dispuesto a invertir más en productos que respeten el medio ambiente y promuevan prácticas éticas.
Para los emprendedores, ofrecer una propuesta alineada con estos valores no solo es una forma de diferenciarse, sino también de generar confianza y lealtad en un segmento cada vez más exigente.
El consumidor omnicanal es aquel que investiga en múltiples plataformas antes de tomar una decisión de compra. Este perfil puede ver un producto en una tienda física, leer reseñas y opiniones en línea y, finalmente, completar la transacción a través del sitio web de la marca.
La coherencia y la integración entre los diferentes canales se vuelven esenciales para captar la atención de este consumidor que no se conforma con experiencias fragmentadas.
Finalmente, el smart shopper se destaca por su búsqueda constante de la mejor oferta. Este tipo de consumidor compara precios, utiliza cupones de descuento, cashback y programas de fidelización para maximizar su inversión.
Su comportamiento calculado lo lleva a aprovechar cada ventaja y a ser muy exigente en términos de valor por su dinero.
Conocer estos perfiles es vital para cualquier emprendedor que aspire a tener éxito en el 2025. La integración de tecnología, el enfoque en la personalización y la comprensión profunda del cliente permitirán a las marcas no solo sobrevivir, sino prosperar en un mercado cada vez más dinámico y competitivo.